Inter Movistar Fútbol Sala continúa con la realización de reportajes de elaboración propia en los que pretende explicar y dar a conocer al público en general todo aquello que rodea a la actividad meramente deportiva. En esta ocasión, la salud vuelve a ser protagonista de la mano de José Prieto, fisioterapeuta del club interista, que nos narra la operación de pubis a la que fue sometido el cierre brasileño Ciço. Pubalgia, dolencia, tratamiento, recuperación… Todo sobre esta importante lesión.
Ha existido una incidencia muy especial en estos primeros meses de competición en nuestros jugadores… la sobrecarga de aductores. Esta sobrecarga de aductores puede más tarde convertirse en pubalgia y después en una osteopatia dinámica de pubis (Ciço). En primer lugar hay que explicar que se dan factores predisponentes para la existencia de esta dolencia como hiperlordosis lumbar (mucha curvatura a nivel lumbar), dismetría de miembros inferiores (una pierna más corta que otra), pies planos o cavos, etc.
Alguna de estas circunstancias junto con las apreturas del calendario deportivo puede provocar el principio de este calvario, una sobrecarga. Pues bien, una sobrecarga muscular viene de una hipersolicitación de un grupo de músculos. Lo peculiar de este grupo muscular es que a pesar de las molestias derivadas del sobreesfuerzo, permite seguir ejerciéndose para volver las molestias finalizado el entreno. Es decir no incapacita en el momento y ello es muy peligroso porque la sobrecarga se convierte en algo más y ello unido a las exigencias de la alta competición es una mezcla explosiva. Concretamente el juego de fútbol sala necesita de cambios de dirección continuos y de una intensidad altísima.
Los aductores o aproximadores responsables entre otras cosas del chut con el interior del pie tienen su origen en el pubis. Y en el pubis también se insertan los rectos anteriores del abdomen. Entre rectos del abdomen y aductores existe una lucha sin cuartel que ganan los músculos aductores (ya que no olvidemos que nuestros protagonistas son jugadores de futbol sala y tienen unos músculos del muslo muy desarrollados). Así se plantea la implementación de un plan de rehabilitación fisiokinesiológico para eludir el quirófano el cual consta de: – Trabajo isométrico de aductores, abductores, rectos del abdomen y oblicuos. – Elongación por posturas excéntricas de los músculos isquiotibiales, rectos y oblicuos del abdomen y aductores y psoas. – Masoterapia y ultrasonido en músculos abdominales y aductores. – Crioterapia luego de la ejercitación kinésica.
En puntos dolorosos se puede complementar con infiltraciones con corticoides; asimismo con medicación analgésica por vía oral. Desde mi punto de vista y experiencia la mejor profilaxis es en primer lugar insistir en sesiones de flexibilidad especiales, un mantenimiento de la misma durante el entrenamiento y una elongación al finalizar los entrenamientos, asociado a una dosificación de las cargas de acuerdo al grupo de trabajo y por último un refuerzo de la musculatura estabilizadora de cadera. Si habiendo implementado un tratamiento kinésico serio e intenso, no obtenemos respuesta después de los 3 meses ello podría desencadenar en la osteopatía de pubis que como ya sabéis es quirúrgico tal y como ha ocurrido con nuestro jugador Ciço. El tratamiento quirúrgico tiene el objetivo de recuperar la calidad de alargamiento de estos diferente músculos y de reforzar sus tendones y sus puntos de inserción. Los ejercicios de flexibilidad clásicos no pueden obtener estos objetivos. En efecto el estiramiento intermitente no hace más que provocar la reacción concéntrica del músculo, incluso si el sujeto realiza estos ejercicios de flexibilidad con una total distensión muscular, el tiempo de estiramiento es demasiado corto para esperar que se pueda remodelar, la vaina del músculo, además la tracción periódica sobre las fibras tendinosas y sobre el periostio no puede hacer otra cosa que facilitar las reacciones inflamatorias con fragilización acentuada de los tejidos y pérdida de calcio de la trama ósea.
Tratamiento quirúrgico. La operación consiste en los siguientes pasos: El tratamiento consiste en la tenotomía de los adductores mayores de ambas piernas y regularización del pubis. – Incisión en la piel, coagulación de vasos, llegando al fondo o cubierta muscular o fascia y apertura de la misma, después se realiza la disección cuidadosa de los aductores, se separan cuidadosamente los aductores con gancho y se procede a la tenotomía mediante el bisturí eléctrico para coagular al mismo tiempo, más tarde se lava con suero. Después se realiza la regularización del hueso del pubis. Y por último se realiza la sutura de la herida quirúrgica. En este link de puede apreciar una tenotomía de aductores.
www.youtube.com/watch?v=A45wEw7_D1E&p=7E58BC44DEE6D286&playnext=1&index=4
El tratamiento postquirúrgico rehabilitador utilizara las herramientas tales como electroterapia analgésica (tens), ultrasonidos, microondas, ondas magnéticas y láser y por supuesto masoterapia y crioterapia. Además de la realización de ejercicios isométricos (en los casos muy álgidos permite obtener rápidamente un efecto sedante sobre las inserciones musculares, sobre los tendones y sobre las vainas de los músculos), estiramientos por posturas excéntricas (realizado después del trabajo isométrico, es soportado mucho mejor por el paciente y la recuperación es más rápida. Los músculos puestos en tensión durante varios minutos de manera constante se fatigan y abandonan su tensión excesiva. La vaina del músculo podrá, a partir de ese instante, alargarse y el músculo recuperará su longitud. La tensión constante sobre el tendón estimula la reconstrucción conjuntiva. La tensión constante sobre el hueso será un factor de reacción germinativa del periostio con fijación cálcica).