Con la excusa de la realización este fin de semana pasado de una nueva formaciòn sobre el fútbol sala me gustaría hablar sobre la necesidad de acudir a estos cursos. Acudí a un curso este fin de semana pasado a Alba de Tormes y a Guijuelo donde Andrés Sanz de Futsalcoach.es y Jesús Candelas nos metieron el gusanillo de la duda en el cuerpo. Entre los asistentes había españoles, portugueses y argentinos. El perfil de la mayoría era el mismo: entrenadores de base, de escuelas de fútbol sala o de clubes modestos.
Es curioso que en la mayoría de los cursos a los que he asistido llama la atención la ausencia de entrenadores de la «èlite». Puedo decir que en muy raras ocasiones me he encontrado compañeros con los que a lo largo del año compartía enfrentamientos. Acerca de esto he de decir que he acudido en ocasiones a clinics y seminarios de otros deportes colectivos como fútbol, baloncesto o balonmano y allí es curiosa y elogiable la mezcla de entrenadores consagrados con gente que esta comenzando. Es ahí donde se ve la riqueza en camino de un colectivo.
Dicho esto me gustaría señalar que sin cursos, seminarios, clinics como el realizado o los que están programados de la Anefs, Castro Urdiales, Lugo, etc…no seria posible conocer a tanto entrenador con gran formación y que en la mayoría de los casos son anónimos. Entrenadores que se te acercan y te comentan lo mucho que le sirve tu trabajo o un ejercicio en particular. Entrenadores muchas veces formadisimos y que no han tenido la fortuna o la posibilidad de sacar la cabeza y dejarse ver. Estos seminarios deben ser una piedra angular para ver como funciona un colectivo como el nuestro. Es ahí donde tenemos que hacer nuestras puestas en común, donde debemos mezclarnos unos con otros, donde tenemos que preguntarnos, aconsejarnos y apoyarnos para crecer. Pero no debemos olvidarnos que la formación es día a día. No podemos dar nada por sabido. No podemos dejar de hacernos preguntas.
No podemos pensar que ya esta todo hecho. Aunque hayamos llegado a entrenar a este club o al otro tenemos que tener claro que cualquier entrenador anónimo nos puede ayudar, nos puede enseñar o aportar algo nuevo. Debemos tener la humildad y sobre todo las ganas de aprender cada dia algo nuevo. Somos entrenadores y tenemos que llevar en nuestro ADN la inquietud permanente.
Un saludo.
